Momentos antes de que empiece la pomposa celebración de su centÃsimo cumpleaños Allan Karlsson decide que nada de eso va con Ãl. Vestido con su mejor traje y unas pantuflas se encarama a una ventana y se fuga de la residencia de ancianos en la que vive dejando plantados al alcalde y a la prensa local. Sin saber adónde ir se encamina a la estación de autobuses el único sitio donde es posible pasar desapercibido. Allà mientras espera la llegada del primer autobús un joven le pide que vigile su maleta con la mala fortuna de que el autobús llega antes de que el joven regrese y Allan sin pensarlo dos veces se sube con la maleta ignorante de que en el interior de Ãsta se apilan ¡santo cielo! millones de coronas de dudosa procedencia.413 PAGINAS
De mis libros favoritos. Relata la historia de un abuelo que terminó en un asilo después de una gran vida, en su cumpleaños 100 se hartó de todo y se fue. Si quieres reírte, no te arrepentirás de leerlo.