Una novela de Frederick Forsyth tan potente como Chacal. Las instrucciones del presidente son: «Identificar, localizar, destruir». En el norte de Virginia se encuentra la sede de la TOSA, una unidad gubernamental de actividades de soporte para operaciones técnicas. Pero su verdadera y única misión es identificar, localizar y destruir a quienes representan una amenaza para Estados Unidos. Sus nombres se apuntan en una lista aprobada por el presidente conocida como «la lista de asesinables». Ahora figura un nombre nuevo: el Predicador. Nadie conoce su identidad. Solo se sabe que es el responsable de diecisiete asesinatos y que utiliza internet para radicalizar a jóvenes musulmanes. Pero acaba de cometer un gran error: su última víctima es un general jubilado de los marines y el padre del Rastreador, miembro destacado de la TOSA. Con un dominio perfecto del árabe, el Rastreador lleva seis años dedicado a eliminar a los altos mandos de Al Qaeda. Esta vez, su misión es pe...