Malone Moulin tiene tres años y medio y un secreto que ocultar. Cree firmemente que la mujer que lo ha criado y con la que vive, Amanda, no es su verdadera madre. Aunque lo que dice el niño parezca imposible, Vasile, el psicólogo de la escuela, confía en él. Le cree. Pero es el único. Y debe darse prisa. Sacar a la luz la verdad oculta. Encontrar ayuda. La de la comandante Marianne Augresse, por ejemplo. Porque los recuerdos de Malone empiezan a difuminarse. Solo los sostiene un fino hilo de la memoria, con sus frágiles retazos, y las conversaciones que el chico mantiene noche tras noche con G