Espina Bathu es una de las pocas chicas de Gettlandia que ha recibido el don de la Madre Guerra. Desesperada por vengar la muerte de su padre, vive para la lucha. Pero tras un trágico accidente en el cuadrado de entrenamiento, su propio instructor la tacha de asesina y se convierte en una proscrita.
Segunda parte de la saga del Mar quebrado, me parece un buen libro que hace honor al primero tanto en historia como en desarrollo, los nuevos personajes se hacen querer y los viejos evolucionan para conseguir sus objetivos, muy recomendable