El relato se inicia muy bien y promete bastante. Tal vez en la mitad flaquea un poco y el autor recurre al viejo truco de usar el sexo como anzuelo para atrapar al lector. Luego logra repuntar con un final magistral. Buena historia, interesante y original.
Una novela sobre uno de los grandes problemas de la sociedad actual, y el modo en que la tecnología puede servir de refugio a los criminales. Vuelve a Aquiles Troyano, protagonista de "vivos y muertos". La internet más profunda sirve de refugio a una inescrupulosa red internacional de pederastas.