En el amor, como en la ciencia, el magnetismo de los polos opuestos puede ser irresistible.Ella: A sus veintidós años y tras una infancia marcada por una trágica pérdida, Penny tiene un montón de sueños que no podrá realizar. Vive en un barrio miserable con su abuela, a la que cuida mientras subsiste gracias a sus dos trabajos. Solo un mechón de pelo teñido y su extravagante manicura dejan entrever su espíritu inconformista...Él: La vida no ha tratado bien a Marcus, y él un día decidió no tratar bien a la vida. Imponente, misterioso, de gesto amenazador y músculos esculturales, expresa su rabia mediante la mirada gélida de sus ojos grises y la vulgaridad de sus palabras.Un destino: Dos seres tan opuestos no pueden quererse, solo tratarse con hostilidad y desconfianza… ¿O acaso acabarán cediendo a la fuerza de los sentimientos y verán que cuando quieres a otra persona, no puedes dejarla ir?
Emotivo y romántico sin ser muy empalagoso. Casi le estoy terminando y no me imagino cómo terminará la historia. Los protagonistas son adorables, cada uno a su manera.
Me atrapó lo suficiente como para no soltar el libro hasta acabarlo, tanto este como la segunda parte. Tiene algunas cosas...sobretodo en tema posesión y ciertas actitudes de hombre cavernícola que hay que pulir...pero por lo demás me gustó.