Un grupo de niños encuentra un cadáver flotando en las aguas turbias de un canal de riego cercano a la ranchería de La Matosa. El cuerpo resulta ser de la Bruja, una mujer que heredó dicho oficio de su madre fallecida, y a quienes los pobladores de esa zona rural respetaban y temían.
Esta novela tiene una narración única y cruda al estilo mexicano donde se desarrollan varias historias que se van entrelazando y a medida que avanzas en el libro, la intensidad de los sucesos es cada vez más agobiante y brutal. Una excelente lectura pero no apta para quienes son muy sensibles.