Él, acaudalado, indiferente, frío, con el mundo a sus pies. Un hombre que lo tiene todo, pero que en realidad no tiene nada. Isabella, decidida, fuerte y huérfana. Lucha incansablemente por sacar a sus dos pequeños hermanos adelante sin la menor posibilidad de lograrlo, pues siempre la vida se ha empeñado en quitarle, no darle. Sus vidas se cruzan en un accidente que trae como consecuencia un cambio total en el rumbo de sus caminos, a partir de ese momento su futuro se unirá y nada volverá a ser igual.
Un ángel ha pasado por la ciudad de Ripoll.Parece algo circunstancial cuando se cruza con Alba, una mujer atribulada y con el corazón roto, a la que intenta ayudar desde su posición ángelica, como haría con cualquier otra alma adolorida.