Sobre nosotros: en la pequeña ciudad de Manacor, en la isla de Mallorca, España, cada perla orgánica hecha a mano está cuidadosamente elaborada con una habilidad que se ha convertido en un arte raro. A lo largo de todo el proceso delicado, se presta atención meticulosa a cada detalle para asegurar estándares de calidad y belleza superiores. En primer lugar, se introduce el núcleo, que tiene el mismo aspecto y peso que los de las mejores perlas cultivadas. A continuación, mimando el propio proceso de la ostra, el núcleo está expuesto a un proceso de capas utilizando un componente derivado de materiales marinos y naturales del Mar Mediterráneo. La apariencia natural de brillo e iridiscencia creada por este proceso está asegurada por una capa final especial que garantiza durabilidad y resistencia contra agentes nocivos.