"No hay nada heroico en matar a un dios. Nada digno de cantar en baladas, nada de lo que estar orgulloso. No hay nada más que un vacío amargo al otro lado de los labios y una vergüenza que pesaba en los párpados." Si después de leer ésto no estáis aplaudiendo y yendo a leer este relato, yo ya no sé.