Es todo un show, es cruda y colorida a la vez, la música está muy bien colocada. Me gusta que saben cómo contar en forma rápida cosas que pasaron y son relevantes para saber por lo que pasa. Lloré, reí, canté, pero sobre todo me divertí mucho.
Basada en la vida de Robbie Williams, interpretado por un mono en CGI, te mantiene atento a la historia todo el tiempo. Un musical que usa muy acertadamente cada momento musical. Una joyita