Shigematsu Shizuma, que vive con su familia en un pueblo cercano a Fukuyama, estuvo en Hiroshima con su mujer y su sobrina justo después del devastador bombardeo atómico, una tragedia que segó cruelmente la vida de miles de personas y marcó para siempre la dura existencia de los supervivientes.
Una película dura sobre la bomba atómica de Hiroshima y las consecuencias que tuvo en los años posteriores. Buenos personajes y magnífico retrato de las heridas que deja la guerra.