El policía forense Paul Herzfeld encuentra dentro de un cadáver una cápsula metálica que contiene una serie de dígitos y el nombre de su hija. Al llamarle para comprobar qué está pasando, esta le pide auxilio, pues ha sido raptada por un asesino en serie sediento de juegos macabros. Aquí empieza una carrera contrarreloj para Paul en afán de rescatar a su hija.
Linda se encuentra en un juego de vida o muerte en una isla aislada por una tormenta. Ella necesita hacer una autopsia para encontrar pistas ocultas en un cadáver y ayudar al forense Paul Herzfeld a encontrar a su hija desaparecida.
El forense Paul Herzfeld encuentra una cápsula en la cabeza de un cadáver mutilado, que contiene un número de teléfono y una sola palabra: el nombre de su hija.