Película con un guión mediocre empeorada por la sobredirección de Fincher. Podría haberse beneficiado de un presupuesto menor y una trama más centradita de thriller agobiante. No necesitábamos conocer tanto a los personajes; pa lo que nos ha contao, mejor no haber sido tan indulgente el Fincher.
Cuando tres hombres armados en busca de un botín escondido irrumpen en su casa, una mujer divorciada y su hija diabética deben refugiarse en una habitación especialmente diseñada para este tipo de situaciones y, desde allí, intentar pedir ayuda.