Yu es un adolescente que se ha criado en el seno de una familia muy cristiana. Recién ordenado sacerdote, su padre le obliga a confesar sus pecados, que él comete buscando la aprobación paterna. Yu se dedica diligentemente a obrar mal, hasta que sus fotos a hurtadillas de bragas de chicas lo catapultan a la fama. Pero entonces conoce a Yoko y se ve envuelto en una misteriosa secta...
Pareja: Yu y Yoko, envueltos de una secta que no tiene desperdicio ninguno.
Su amor es especial porque: ambos son personajes extraños (a ver, es Sion Sono tras la cámara) y su relación tarda cuatro horas en llegar a ¿buen? puerto.