Un pueblo para olvidarte de los problemas, quedarte en una cabaña, con un café y un pan de queso, o probando uno de sus vinos de sabores... Dar un paseo en caballo, ir a las cascadas...
Entrar a este Pueblo Mágico es llegar a un mundo distinto, se percibe niebla y frío, como si alguien hubiera levantado la comunidad entera hasta las nubes. Por las tardes rápidamente las calles se llenan de niebla y no es posible verse ni la punta de la nariz.
Zacatlan es sinónimo de manzanas, así que a tomar sidra y champange, pero también existen bellezas naturales como la cascada de tuliman y las piedras ensimadas, que son imperdibles en tu visita, da un paseo al atardecer por su tranquilo y pintoresco centro donde la foto en el reloj es obligatoria