La impresión con Doppelganger fue inmejorable, y nos enamoramos de tres de sus platos: el taco de gamba blanca, las albóndigas tempurizadas de cerdo agridulce y el tamal relleno de rabo de ternera preparado como si fuera chili con carne.
Un lugar en el que puedes probar platos increíbles con una mezcla de sabores, texturas alucinantes!
Para disfrutar la experiencia de verdad lo mejor es dejarse aconsejar por los cocineros, son muy amables, te explican cada plato con las elaboraciones realizadas en el momento de servirlo.