Para los amantes de la malta, aquí podremos apreciar los auténticos matices de la cerveza Barcelonesa, disfrutar del buen ambiente y sobretodo tener la oportunidad de probar el Picantó a la Moritz! Sólo con verlo se te hace la boca agua.. Increíble!
Comida muito boa e espaço lindo. Preços acessíveis em comparação aos preços normais de Barcelona. DICA: vão ao andar de baixo que é mesmo uma fábrica de cerveja.