Este no es un restaurante cualquiera. Es uno de los más lujosos de Madrid, no es económico, pero merece la pena cada euro gastado. Trato sublime, sabores inigualables... Es perfecto para una ocasión especial.
Un regreso al siglo XIX. Merece la pena conocer este restaurante, uno de los más emblemáticos de Madrid. El mobiliario, la cubertería, la decoración, el servicio, la cocina...todo está rozando la excelencia.