Sin duda es de mis cafeterías preferidas. Me encantan sus desayunos y sus meriendas e incluso sus cenas con pizzas elaboradas por ellos mismos. Quizás el precio es un poco más elevado que cualquier otro sitio por los productos que tienen, pero merece la pena.
Lo mejor para tomar un gran té, una pastelería exquisita y natural. Es un placer que te atienda Pablo, te explica los ingredientes de todo, cuanto tiempo necesita tu infusión.