Para mí lo mejor del sitio es su historia, saber que Audrey Hepburn o Grace Kelly también pisaron el mismo suelo. Los cócteles son geniales y además ponen aperitivo dulce y salado. También hay espectáculos y DJ.
Siempre que voy al Chicote me siento en mi salsa. Se respira un ambiente emocionante y cargado de historia. Por supuesto, cócteles geniales y música fantástica.