Un joven despierta un día después de una extraña pesadilla, y descubre que ha quedado atrapado en su departamento. Sin embargo, encuentra en una pared del baño un hoyo: es un túnel que le lleva a la faceta siniestra de Silent Hill. ¡Tiene momentos de terror buenísimos!
Aun que lo terminé 2 veces, es uno de los juegos malditamente más difíciles que he jugado. A demás de ser escalofriante y tener una historia bastante buena, el desarrollo del juego es excelente. La dificultad es jodidamente buena y cuentas con 8 finales distintos. 10/10