Cuando la jovencísima Mikage se queda sola a la muerte de su abuela, se refugia en la cocina de su vasta casa. Un día, sin embargo, un amable muchacho llama a su puerta y le propone que vaya a vivir con él y con su madre, Eriko. Sin embargo, esta hermosa y acogedora mujer no es quien parece ser. Una fábula en la que la soledad y la aridez emocional quedan mitigadas por la inmensa sabiduría de otro mundo ancestral.
My favorite room of the house is also the kitchen. Never had I read a book that made me feel so sad, but the kind of sadness that heals. Banana Yoshimoto managed to do that. I enjoyed this book so much! I’m so happy it has a place in my shelf.
Dos relatos sobre dejar ir a las personas y los recuerdos que quedan dentro de la cotidianidad. La autora te muestra japon a través de sus letras y te lleva a sacar y reflexionar sobre la pérdida de un ser querido.