Suiza, 1882. Bárbara Miranda, una psicópata custodiada por la organización conocida como el Sello de Brandenburgo, escapa de su celda y desaparece. Oviedo, un año después. Ramón Férez, primogénito de un rico industrial, es asesinado y, para desesperación de las fuerzas del orden, no dejan de aparecer sospechosos.