Restaurante de comida contemporánea de muy buena calidad y con precios muy asequible. Es el lugar ideal para ir a desayunar con amigos o tomar un café y disfrutar de la arquitectura y diseño del lugar. Su platillo estrella para desayunar son los chilaquiles divorciados con longaniza de Valladolid.
Cocina contemporánea con un toque de comida típica, me encanta el lugar esta ubicado en un lugar con una arquitectura e interior is mi increíble lo recomiendo 100%. MÉRIDA, YUCATÁN