Después de tres años en prisión, Cruella de Vil sale en libertad condicional. Aparentemente se ha convertido en una firme defensora de los animales, pero no es más que una máscara para continuar con su planes de hacer abrigos con piel de dálmata.
Blanquita, la cachorra dálmata sin manchas, se une a Bocazas, un delirante loro que se cree un rottweiler, para buscar sus manchas. El extraño dúo, además, debe vencer a la malvada Cruella De Vil.