James Nash está ansioso por llevar las riendas del imperio empresarial familiar, pero la única condición que su padre le pone para hacerlo es que siente la cabeza.Él sabe que quien quiere algo, algo le cuesta, aunque sea pasar por un matrimonio de pura conveniencia, puesto que no cree ni en el amor ni en el compromiso.Y no se le ocurre nada mejor que proponerle matrimonio a Joana Sinclair, su secretaria, a cambio de una jugosa cantidad de dinero.Para él sin duda es la candidata perfecta para un matrimonio por interés y un posterior divorcio sin traumas ni rencores: está hasta arriba de deudas, le odia desde lo más profundo de su ser, y además está locamente enamorada de Harry Smith, el jefe de informática de la empresa. Joana decide aceptar la propuesta delirante de su odiado jefe para sanear de una vez sus finanzas, ya que además la familia de James vive en las Bahamas y solo debe fingir que le ama el día de la boda.En fin, que es pan comido… Y James por supuesto que piensa ...