Cuando conoció a Pablo Escobar, con solo trece años, Victoria Eugenia Henao ignoraba que su vida estaba a punto de convertirse en una pesadilla terrible, y que jamás dejarían de señalarla.
Cuando conoció a Pablo Escobar, con solo trece años, Victoria Eugenia Henao ignoraba que su vida estaba a punto de convertirse en una pesadilla terrible, y que jamás dejarían de señalarla con él.