Era una deuda personal y, por fin, la he leído y pagado. Reconozco su excepcional originalidad y su fama como rompedora de moldes novelescos. Pero no me ha llegado ( y era la segunda vez que lo he intentado). Ha sido un ejercicio de disciplina, y me ha costado. Oliveira, La Maga, Morelia, Paris...
Para los pelotudos que leen una frase como "andábamos sin buscarnos pero sabiendo que andábamos para encontrarnos" y creen que eso es Cortazar, le haria bien leerlo. No dejaran de ser pelotudos, pero podran o tendran, algo de claridad al menos.