A través de su increíble historia, Kelly nos revela un entorno absolutamente hostil al ser humano y cuáles fueron los retos más extremos que tuvo que afrontar: los devastadores efectos corporales, la tristeza y la soledad que conlleva estar separado de los seres queridos, el total y absoluto aislamiento de todas las comodidades terrestres, los catastróficos riesgos de chocar contra basura espacial y, aún peor, la amenaza angustiante de ser incapaz de ayudar si algo malo ocurre en casa.