Kerouac nos guía al compas del recuerdo por sus días en la Ciudad de México. La historia de un enamoramiento a través de aventuras relajantes y un tanto dolorosas que experimentó el propio autor por las calles más reconocidas de la ciudad, además, es una prueba de lo fugaz que puede resultar el amor
Dicen que es el mejor libro que un extranjero a escrito sobre México y creo es verdad. La historia es cruda, autobiográfica y reflexiva. Es un relato de poca extensión y escrito a manera de un solo de jazz. No es para leerse a la ligera. No es para todos los estómagos. 10/10