Dos parejas que se conocen y han estado juntas desde hace 20 años, deciden celebrarlo con unas vacaciones en Samaná. Todo va bien hasta que una de las chicas, ya un poco borracha, confiesa que hizo trampa para quedarse con su actual marido.
La película parece interesante, aunque es un poco caótica y se acaba sin resolver demasiado nada. Se entiende lo que ocurre, pero es caótica a ratos. Aún así, los actores son maravillosos y te echas unas risas.