Owen es un niño maltratado por sus compañeros de clase y abandonado por sus padres divorciados. Sin embargo, su vida solitaria cambiará cuando conozca a su nueva vecina Abby, que vive con su silencioso padre.
Ok, admito que la trama central de la película no me llamó mucho la atención, pero los visuales de la misma están geniales. Completamente buenos. Por ahí encontré escenas que son joyas, y el final si que te deja con un sabor de boca amargo. Eso sí que es querer vivir sin importar los otros.