Dirigida en 1958 por Masamura, ilustra los esfuerzo de una compañía de dulces ("World") por ser líder del sector frente a otras dos fábricas de caramelos. Voraz crítica sin caducidad al asfisxiante mundo capitalista. C: 《¡Quéjate a Japón, no a mí!》 Valoración Filmestock: 8.5/10