Después de la confusión de la primera película, las divertidas aventuras de Tino y Jane continúan. Todavía sintiendo el sabor amargo del fracaso, ven una luz al final del túnel con la inesperada herencia del tío Olavinho. Sin embargo, el testamento trae un pedido inusual: su tío rico quiere que sus cenizas sean arrojadas al Gran Cañón. Aprovechando el viaje a cumplir este deseo, la pareja decide pasear en Las Vegas y viven situaciones cómicas. El gastón Tino caerá en las tentaciones más grandes en la ciudad de los casinos.
Este sitio utiliza tecnologías de rastreo. Puede optar por aceptar o rechazar el uso de estas tecnologías. Leas sobre el tratamiento de datos en nuestra Politica de Privacidad