La Inglaterra rural de 1865. Katherine (Florence Pugh) vive angustiada por culpa de su matrimonio con un hombre amargado al que no quiere y que le dobla la edad, y de su fría y despiadada familia. Cuando se embarca en un apasionado idilio con un joven trabajador de la finca de su marido, en su interior se desata una fuerza tan poderosa que nada le impedirá intentar conseguir lo que desea.
Gran adaptación de una novela, vemos a una protagonista asesina que sin embargo se gana la empatía y podemos entender sus razones y el contexto tan hostil para las mujeres y nos lleva a reflexionar a partir de las condiciones actuales.