Ser madre, padre, pareja, amigos, enemigos, desconocidos... Hay procesos en la vida que parecen una montaña rusa, y el embarazo es uno de ellos. María Rodríguez Soto y David Verdaguer lo saben, pues ofrecieron ese momento (real) a Carles Marqués-Marcet para componer esta bellísima película.
Si un embarazo es, imagino, toda una aventura, grabar uno real es ya otro nivel. Qué bonita es esta película y qué bonita es Barcelona.