Alemania, principios del siglo XIX. Kaspar es un enigmático muchacho que ha pasado toda la vida encerrado y aislado en una cueva: no conoce, pues, el lenguaje ni tiene capacidad para relacionarse con los demás. Cuando, en 1828, alguien lo abandona en Nuremberg con una carta para las autoridades locales, se convierte primero en una especie de atracción de feria y después en una curiosidad científica y social.
Mantido totalmente isolado do convivio humano ele foi resgatando e tem de aprender a falar, a andar, a se expressar... e a lidar c a hipocrisia da propria sociedade.